La Máquina de Injerto Manual 4T es una pinza capaz de realizar 4 tipos de injerto: Injerto entrelazado, Injerto inglés de doble agarre (NEW LAMA), injerto Omega e injerto Gem. Con un solo Grafter podemos hacer los 4 modelos de corte ya que tiene cuchillas intercambiables, simplemente desatornillando los dos tornillos que se encuentran en el cabezal se puede montar la cuchilla deseada. Existen 4 tipos de injertos para poder cubrir las distintas necesidades de las plantas que responden de forma diferente cuando se cortan, por lo que es posible operar en frutales, vides, kiwis, flores, etc…

CONEXIÓN DE ENCLAVAMIENTO

El injerto entrelazado se encuentra entre los más antiguos y todavía se usa ampliamente en la actualidad. Puede practicarse durante todo el período de reposo vegetativo de las plantas pero los mejores resultados se obtienen injertando al inicio del reposo (octubre-noviembre) o, mejor aún, antes de la fase de recuperación primaveral (febrero). De esta forma se supera el peligro del frío invernal, que limita considerablemente las posibilidades de arraigo.

TAPÓN DOBLE EMBRAGUE INGLÉS

El injerto inglés Double Split es un tipo de injerto nacido en la viticultura pero que luego se extendió también a la fruticultura y es apto para todas las especies arbóreas. Tiene un alto índice de enraizamiento y minimiza las marcas y heridas entre el patrón y el vástago. Esta gran superficie de contacto es la razón de la alta tasa de éxito de este tipo de compromiso. La diferencia entre un split inglés simple y un split inglés doble radica en la presencia o ausencia del corte intermedio el cual tiene una función de tipo mecánico. Este corte crea una cuña que bloquea el movimiento del vástago. Se practica en plantas jóvenes que tienen un diámetro entre 0,5 y 1,5 cm. El diámetro del portainjerto y del vástago debe ser lo más cercano posible para que las zonas cambiales encajen completamente juntas.

ENCHUFE OMEGA

El injerto Omega se utiliza particularmente en las plantas de Vid y de Rosa que, una vez cortadas, tienen una salida considerable de savia. Para favorecer el injerto de los biontes se procede con el injerto Omega que crea un corte en forma de ojal que permite regular el flujo de la linfa y permite una buena cicatrización a futuro. Este tipo de injerto se recomienda especialmente al inicio del descanso vegetativo de las plantas (octubre-noviembre) pero también se puede practicar en la fase de recuperación primaveral (febrero).

injerto de BUD

Son injertos sobre plantas los injertos de ojo o de escudo o de yema propiamente dicha, parche, flageolet, doble escudo, mallorquín o «Chip budding», es decir, todos aquellos injertos en los que el objeto está constituido por una gema combinada con una porción, más o menos grande de tamaño, de corteza, con o sin madera debajo. La época, para este tipo de injertos, puede ser tanto primavera como finales de verano y por tanto se divide en injerto con yema vegetante e injerto con yema dormida. Un injerto a yema vegetante se define como aquel en el que la yema, nada más enraizar, brota y vegeta durante todo el verano, mientras que un injerto en yema latente es aquel en el que la yema enraiza y se suelda al portainjertos antes del invierno. , pero la brotación ocurre solo en la primavera siguiente.

CÓMO UTILIZAR:

Para realizar el injerto el procedimiento es muy sencillo: se hace un corte en la planta madre obteniendo un macho y una hembra, se elimina el macho. Se toma el vástago y se hace un corte como antes, pero esta vez se expulsa a la hembra de las dos partes. Ya solo queda unir el macho y la hembra así obtenidos al hacer coincidir bien los dos ladridos. Es importante que siempre esté la hembra en la planta madre porque es la planta la que la acoge y que esta nunca sea más pequeña que el vástago sino más grande o del mismo tamaño. De hecho, incluso si el vástago es más pequeño que la planta madre, es suficiente unir las dos partes en un solo lado para que las cortezas estén alineadas ya que la parte del pico (es decir, donde se produce el intercambio de savia) permanece exactamente debajo de la corteza. sí mismo. El último truco es elegir un vástago de unos 12 cm y comprobar que tiene al menos 2/3 cogollos. También hay que recordar que, aunque el corte es muy preciso, el injerto así obtenido debe estar siempre atado y rematado porque lo que hemos hecho es en cualquier caso una herida abierta en la planta que hay que curar. Para ello existen multitud de productos en el mercado desde parafina hasta masilla pasando por cera de abeja para cicatrización, rafia y cintas de unión.

Gracias a esta tenaza también se pueden realizar injertos en plantas pequeñas o ramas jóvenes con gran precisión, no es necesario cortar toda la planta con la ventaja de poder salvarla en caso de que falle el injerto.

La tenaza es muy resistente ya que tiene alma de acero y cuerpo de nylon relleno de fibra de vidrio, lo único que se desgasta con el tiempo es la hoja que al ser intercambiable se puede adquirir después de la compra básica.